Quebec profundo y Ottawa (días 16-20)

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Nuestro roadtrip seguía sentido norte bordeando el río Saint-Laurent, con la primera parada muy cerca de la ciudad de Quebec: las cataratas Montmorency. Menos conocidas que las del Niagara, pero no por eso menos impresionantes. Es la más alta de Canada, y se puede ver desde arriba, a través de un puente, desde un lateral que puedes ir bajando o desde abajo. Nosotros fuimos con Laure, que también quería visitarlo, e hicimos todo el recorrido para verlo desde los diferentes ángulos. Nos pareció precioso y que está muy bien montado para visitarlo; desde luego mereció la pena.

 

Seguimos por el borde del Saint-Laurent, disfrutando del paisaje y de los pequeños pueblos que íbamos pasando, pero sin parar ya que ninguno tenía nada en especial. Sin embargo acertamos de pleno en el que paramos a comer: Port-au-Persil. Un pequeño “pueblo” de 4 casas totalmente esparcidas pero con un borde del río muy cuidado y un pequeño riachuelo que bajaba entre piedras. Un paraje perfecto para comernos nuestros sandwiches de jamón york y queso como podéis ver, jejeje.

Port-au-Persil
Port-au-Persil

 

Nuestro destino era un pequeño albergue perdido en la montaña de un pequeño pueblo llamado L’Anse Sant Jean, en el corazón del fiordo de Saguenay. Era un albergue tranquilo, pero que estuvo prácticamente lleno las 3 noches que estuvimos (también porque era fin de semana), y sobre todo de franceses o belgas. No se si muchos de vosotros habéis visitado Quebec, pero para nosotros era un lugar bastante desconocido (injustamente, porque la verdad es que merece mucho la pena). Sin embargo, hemos llegado a la conclusión de que debe ser un destino muy popular en las zonas francófonas de Europa, porque casi todos los turistas hablaban frances. La verdad es que nos ha venido bien para practicar y hacer oído de francés, aunque fuera con un francés diferente.

Albergue
Albergue en L’Anse Saint Jean

 

El plan en este paraje era claro: ver ballenas en Tadoussac, hacer alguna excursión por la montaña y descansar. ¡Objetivo cumplido y además con creces! Lo de descansar y hacer una excursión eran fáciles, pero ir ver ballenas no siempre da resultado y nosotros tuvimos suerte.

Contratamos una excursión en zodiac ($80 CAD), ya que nos comentaron que a pesar de que el barco era más barato, no se acercaba tanto a los animales, lógicamente no se movía igual de rápido en caso de verlas a lo lejos, y merecía la pena coger el zodiac. Nos pusieron los pantalones y un super abrigo, y el chico que lo conducía nos iba explicando lo que veíamos y características interesantes.
Vimos 4 ballenas blancas (belugas) al principio de todo; una ballena jorobada que saltó un poco sobre el agua; una ballena de las que saca la cola antes de sumergirse; y un cuarto tipo de ballena. ¡Una bella experiencia sin duda! (En este link a Instagram podéis ver el vídeo que grabamos de otra ballena: http://instagram.com/p/ukWX4tg7dJ/ )

 

La excursión por la montaña en el Parque del Fiordo de Saguenay también fue muy gratificante. Nos habían dejado un pase anual para los parques nacionales canadienses que acababa este septiembre (¡gracias Antonio!), sin embargo no pudimos aprovecharlo, ya que aunque el nombre decía “Parque Nacional”, lo gestionaba la región de Quebec, y por lo tanto no estaba incluido en el pase. Para futuros visitantes de Quebec, os recomendamos echar una ojeada a la lista de parques que pertenecen a cada red o fijarse en el dibujo de un castor con la bandera canadiense que indica que es un “Parque Nacional”.
Total, que a la entrada del parque preguntamos a la ranger por el recorrido más bonito o interesante, y su recomendación inicial fue: una vía ferrata 9 (para los que no sepáis las vías ferratas son las categorías de paredes para escalar). Ilusa de mi, aunque me sonaba que 9 era nivel muy difícil, le pregunté si 9 era de las fáciles, y la chica me contesta ¡que es de las más difíciles del mundo! ¿En que momento nos vio a nosotros cara de escaladores profesionales, cuando íbamos preguntando por “algún recorrido que podríamos hacer”? Escaladores, ya sabéis, en el parque del Fiordo de Saguenay, una buena pared os está esperando.
Al final, hicimos un recorrido de 4 horas ida y vuelta que permitía ver las dos laderas de una montaña y ofrecía unas vistas panorámicas extraordinarias, tanto de la bahía Éternité como del fiordo del río Saguenay.

 

De todas maneras, aparte de estas “actividades” en concreto, lo bonito realmente es toda la zona en sí. Las montañas que se atraviesan conduciendo, llenas de árboles de todos los colores, son espectaculares. Es fácil encontrarse con pequeños riachuelos empedrados o grandes lagos de agua tranquila. Desde luego, una región que nosotros recomendamos (aunque las fotos no hacen mucha justicia de los colores que realmente vimos).

 

Después de esta escapada, volvimos a casa de Bibo en Montreal, para hacer la última excursión: Ottawa, capital de Canada. Y con la idea de rentabilizar un poco el alquiler de coche, nos dimos de alta en una web online de compartir coche, tipo blablacar que en la zona de Quebec se llama AmigoExpress. Nos lo había comentado Laure, y aunque lo intentamos hacer antes, lo pusimos tarde y no dio sus frutos. Pero para ir a Ottawa recogimos a Pierre, un burundés que llevaba tiempo instalado en Quebec y que nos hizo el trayecto de ida y vuelta mucho más ameno, contandonos historias tanto de Montreal como de Burundi.

Ottawa la vimos en unas 3 horas. Nos habíamos acostumbrado al frío canadiense (pudimos manejarnos más o menos bien con la ropa que teníamos), pero el viento de Ottawa nos estaba dejando helados. Además, tampoco es que tenga gran cosa como ciudad. Vimos los edificios oficiales como el Parlamento (el cual estaba cerrado al público porque coincidió con la visita del presidente de Korea del Sur) o el corte supremo; coincidimos con el cambio de guardia del Memorial Nacional de Guerra; paseamos tanto por el canal Rideau como por el río Ottawa que separa las regiones de Quebec y de Ontario. Lo cierto es que se veía ese toque inglés en los edificios y por ejemplo nos gustó mucho el parlamento, aunque suponemos que ya lo habréis visto en la tele debido a los últimos acontecimientos…

 

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3 Respuestas

  1. Muchas gracias por tu respuesta!

  2. ¡Hola! Acabo de leer vuestro post sobre la región de Quebec porque estoy preparando un viaje por esa zona. Nosotros también queremos ir a hacer el avistamiento de ballenas, pero me da un poco de medo la zodiac porque no sé si se acerca tanto a las ballenas como para que pueda llegar a ser peligroso recibir una embestida de alguna de ellas. ¿Qué os pareció a vosotros? ¿Es totalmente seguro?

    • Comiendonos El Mundo

      Hola Laura!
      Qué bien que vayas a Quebec! Nuestra experiencia en cuanto a la distancia con las ballenas fue muy buena; intentaron acercarnos para que tuvieramos una buena vista de ellas, pero siempre manteniendo una distancia prudente. No creo que haya mucho problema con respecto a este aspecto.
      Lo que sí que te recomendamos es que guardéis a buen recaudo todos los “dispositivos electrónicos” (principalmente las cámaras), ya que la zodiac va muy muy rápido y salpica bastante. Nuestra cámara se estropeó así 🙁
      A parte de esto, te lo recomendamos al 100% y te deseamos mucha suerte con el avistamiento!! 😉
      Saludos y pásatelo bien!

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