Guilin

Guilin y los arrozales (días 234-235)

Tras algo de retraso por haber estado esperando a que mejorara el tiempo en Shanghai, aterrizamos en Guilin. Otra gran ciudad China según nuestros estándares que está situada en un enclave privilegiado entre montañas kársticas. Volvíamos a estar en ruta. Había que calzarse el mono de mochilero otra vez y salir a explorar.

Perezoso aún tras nuestro descanso en Shanghai, me quedé en el hostal mientras Amaia visitaba las Reed Flute Caves. Son unas cuevas cercanas a la ciudad. Destacan sobretodo por las luces psicodélicas y coloridas que iluminan las estalagmitas. Se pueden visitar por cuenta propia, aunque hay que pegarse a algún guía para poder disfrutar de las luces, ya que tienen temporizador y se activan con una tarjeta. ¡Muy mal montado! Dentro de la cueva se encuentra también la cueva de la Tortuga, que se paga extra y es toda una estafa. Se trata de una pequeña cueva donde tienen unas cuantas tortugas en diferentes pozos y encima de mesas para que los chinos les recen pidiendo buena suerte. ¡Pobres animales!

Reed Flute Cave
Las psicodélicas luces del Reed Flute Cave lo hacen mucho más atractivo de lo que sería con luces blancas
Tortugas
Las pobres tortugas se encuentran rodeadas de monedas en estos pequeños pozos
Barco
El paseo en barco hasta la cueva se realiza en este tipo embarcaciones que cruzan el lago

 

A su regreso, nos refugiamos del intenso calor en nuestro hostal molongui y antes del atardecer salimos a explorar la zona de los cuatro lagos. El paseo a través de las pasarelas y caminos que los rodean es agradable y digno de recorrer. En uno de ellos, se encuentran las Pagoda del Sol y de la Luna. Estos bonitos templos tienen la peculiaridad que se iluminan al anochecer, una adquiere un color amarillo (sol) y la otra blanco (luna), convirtiendo la bonita estampa en uno de los reclamos de la ciudad. Tras el paseo, nos acercamos al mercado local y dimos por concluido nuestro día de turismo en la ciudad. Además de éstos, Guilin ofrece otros atractivos populares, como subir a alguna colina, por ejemplo la del elefante, así como salir en crucero por el río Li. Pero descartamos todas esas actividades esperando disfrutarlas en Yangshuo.

4 lagos
La zona de los 4 lagos ofrece un bonito paseo con puentes
Templo del sol
El Templo del Sol y el de la Luna son preciosos cuando cae la noche y se iluminan

 

Aprovechamos nuestra estancia en la capital de Guanxi para visitar los arrozales de Longji, que nos gustaron algo más que los de Sapa. Éstos, situados a unas dos horas al norte de Guilin, son de visita obligada si se está por la zona. Aunque es posible pernoctar en los pueblos más turísticos, Dazhai y Ping’an, nosotros nos conformamos con una visita de día. En los dos pueblos mencionados anteriormente, es donde se encuentran los miradores más bonitos a esta obra de arte de la agricultura. Coincidimos en el inicio de la época seca, que es cuando van adquiriendo un color más amarillento. Algunos, prefieren la época del sembrado cuando se inundan y se refleja el sol, otros después de la época de lluvia cuando lucen un verde intenso. Para gustos los colores, nunca mejor dicho, pero hay que admitir, que en cualquier época, tienen su encanto.

Longji
Los espectaculares arrozales de Longji
Longji
Arroz, teleférico (¡cómo no!), arrozales y trabajo; los contrastes de Longji

 

En la zona habitan varias etnias con la peculiaridad que nunca se cortan el pelo. Muchas de ellas, han aprovechado el tirón turístico para vender refrescos, snacks y hasta cargar mochilas con el fin de ganarse un extra. A veces pueden ser algo insistentes, pero siempre muestran una sonrisa y son amicales. Además, en vista que el gobierno/empresa privada se lucra con su trabajo y de los casi 15 eurazos que te cobran, poco o nada va a parar a la comunidad local, bastante que sonríen. Además, sin olvidarse que seguro que les obligan a tenerlo todo lo más cuidado y bonito posible para que nosotros podamos sacar las mejores fotografías.

Etnia Yao
Una mujer de la etnia Yao con su largo pelo negro recogido en un moño frontal

 

De Dazhai a Ping’an decidimos caminar en busca de algo de tranquilidad. El camino en sí está bien pero no es nada espectacular. Transcurre entre bosques y partes donde las terrazas están mayoritariamente descuidadas y abandonadas. Sin embargo, es perfecto para toparse con algunas estampas del día a día de la gente local. Especialmente los mayores, que ajenos a los foráneos, siguen cargando en sus capazos la cosecha a través de empinadas cuestas con tal de subsistir.

Vida rural
Vida rural rodeada de turismo

 

Finalizada la visita y no habiendo nadie que nos aclarara donde coger el autobús de vuelta a Guilin, hicimos dedo. Tras varios coches, logramos que una chica con sus padres nos cogieran. Además, no nos acercaron sólo hasta el cruce, sino hasta el destino final. Agarrados a los asientos y sudando, vivimos en primera persona como se traspasan los malos hábitos de conducción de generación en generación. La chica, novata y con pocas habilidades, se veía obligada a adelantar a ciegas por la insistencia de sus padres. Aunque la peligrosa conductora resistía e intentaba negarse a cometer todas las locuras, acabó uniéndose a los espóleos de sus padres. Empezó adelantando por el arcén o el carril contrario en un atasco y se lo pasó pipa incumpliendo todas las normas de seguridad vial. Toda peripecia era buena con tal de avanzar unos metros más. ¡No se dan cuenta que todos hacen lo mismo y lo único que consiguen es formar colas aún más largas! Tras el rally, ya más relajados, agradecimos al kharma habernos hecho llegar enteros y a tiempo para tomarnos unas cervecitas y ver el Barça un rato.

 

Información práctica

Transporte
  • Autobuses urbanos
    • #3 a la Reed Flute Cave: 1¥ (45min)
    • #1 a la estación de buses: 2¥
  • Autobús Guilin – Heping: 26¥
  • Autobús Heping – Dazhai: 15¥
Alojamiento
  • Ease Hostel: 19¥ cama en habitación compartida con agua caliente y wifi
    • Es un hostal moderno, muy limpio y con un gran espacio común. Recomendable
Actividades
  • Entrada Reed Flute Cave: 110¥
    • Caminar hasta la entrada son 5 minutos
    • Tren hasta la entrada: 35¥
    • Paseo en barco de bambú: 10¥/pers
    • Entrada a la Cueva de la Tortuga (está dentro de la Reed Flute Cave): 5¥
  • Entrada a los arrozales de Longji: 95¥
Recomendaciones y sugerencias
  • Si queréis comer barato, cerca del Ease Hostel hay un restaurante que prepara unos noodles bastante sabrosos, muy recomendables calidad-precio.
Noodles
El sitio de los noodles al lado del Ease Hostal

 

  • A menos que se tenga especial ilusión en coger un «Tren de la Selva» que va al lado del camino o un «paseo en barco de bambú» que lo único que hace es cruzar un lago, es mejor hacer caminando el trayecto entre la taquilla y la entrada a las cuevas Reed Flute.
  • No entrar en la cueva de la Tortuga, no merece la pena en absoluto.
  • Creemos que las vistas realmente bonitas están en Dazhai y Longji. Si se tiene tiempo de hacer el recorrido entre ambas, está bien; pero sino, es mejor centrarse en estos dos lugares y moverse de uno a otro en autobús.

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